Imagen extraída de Creating Defensible Space
Probablemente una de las obras más importantes de Oscar Newman, pionero de estos estudios, es Defensible space: people and design in the violent city publicada por Architectural Press en el año 1971. En 1996 llegó a desarrollar un manual titulado Creating Defensible Space conjuntamente con U.S. Department of Housing and Urban Development y Office of Policy Development and Research. En ella se incluyen algunos principios básicos sobre diseño de espacios seguros, ejemplos y normas propias de un manual.
Este interés por el tema ha sido, durante bastante tiempo, casi únicamente patrimonio de los sociólogos (empezando por la Escuela de Chicago) pero, últimamente ha empezado a despertar la curiosidad también entre algunos profesionales del diseño urbano hasta el punto que, incluso, se han llegado a publicar manuales destinados a ellos. Casi siempre los intentos de prevención de la delincuencia relacionados con el diseño urbano se han basado en dos premisas esenciales:
- En primer lugar en la llamada “vigilancia informal” (ver y ser visto).
- Y también en el “control del espacio urbano” (buenos sistemas de orientación e iluminación adecuada).
Imagen extraída de Safer Places
Estos dos principios, vigilancia informal y control del espacio urbano han sido adoptados con un cierto interés por el diseño urbano aunque no puede decirse lo mismo respecto a la planificación. A veces también se habla de "control personal" como, por ejemplo, en la descripción de la Buena Práctica titulada Programa de Seguridad Ciudadana en el Distrito de Oosterwei en Gouda (Países Bajos) del Concurso Internacional de Buenas Práctica de Dubai de 1966.
En general podríamos decir que estas relaciones entre diseño urbano y prevención de la delincuencia se han producido de forma bastante estrecha en los últimos años destacando, sobre todo, la labor normativa de algunos países como el Reino Unido o Sudáfrica. Incluso la Unión Europea, a través del Comité Europeo de Normalización (un camino un tanto retorcido) tiene un funcionamiento el Comité Técnico 325 con la misión de reducir la delincuencia a través del diseño y la planificación urbana. La finalidad del TC325 es: "La propuesta de estándares europeos en diseño de edificios y planeamiento urbano para conseguir la prevención del crimen en áreas residenciales de nueva creación, incluyendo locales comerciales".
Estas corriente se ha concretado en diferentes metodologías, entre las que destaca la llamada CPTED (Crime Prevention Through Environmental Design) tanto por las actuaciones llevadas a cabo como por el cuerpo teórico desarrollado. La CPTED ya ha sido ya implantada con éxito en bastantes lugares del mundo pero no es la única metodología que permite mejorar la seguridad modificando adecuadamente el ambiente urbano y arquitectónico. Ciudades como Toronto y países como Inglaterra, Sudáfrica, Holanda o Chile han intentado buscar sus propios sistemas. En la delegación europea de la ICA (International CPTED Association) se puede encontrar mucha información.
En realidad, un impulso muy importante a estos temas ha venido de las organizaciones feministas ya que las mujeres son uno de los colectivos que más sufren estos temas de violencia urbana. Pueden encontrarse algunos datos y enlaces en la página de generourban.
Quien esté interesado en comenzar el estudio de estas cuestiones puede encontrar una excelente bibliografía (incluso con remisión a lugares de la red fundamentales) en la publicación de la European Crime Prevention Network titulada A review of scientifically evaluated Good Practices for reducing feelings of Insecurity or Fear of Crime in the EU member states. Es un poco antigua (del 2004) pero merece la pena.
Parece pues que existe ya un mínimo cuerpo de doctrina en relación con el diseño urbano que permite establecer unas ciertas pautas. Resulta, sin embargo, bastante decepcionante el escaso interés de los urbanistas y los arquitectos por el tema: en la reciente conferencia Internacional "Ciudades, Urbanismo y Seguridad" celebrada en Madrid en enero de este mismo año la asistencia de estos profesionales fue muy escasa (pienso que no estábamos más allá de una decena). Las "ciudades seguras" están en la base de todas las justificaciones de la forma de construir la nueva ciudad fragmentada y en la explicación de los cambios que se están produciendo en la manera de usar los espacios públicos. Su estudio y análisis, por tanto, debería estar entre las prioridades de los centros de investigación y enseñanza.
En general podríamos decir que estas relaciones entre diseño urbano y prevención de la delincuencia se han producido de forma bastante estrecha en los últimos años destacando, sobre todo, la labor normativa de algunos países como el Reino Unido o Sudáfrica. Incluso la Unión Europea, a través del Comité Europeo de Normalización (un camino un tanto retorcido) tiene un funcionamiento el Comité Técnico 325 con la misión de reducir la delincuencia a través del diseño y la planificación urbana. La finalidad del TC325 es: "La propuesta de estándares europeos en diseño de edificios y planeamiento urbano para conseguir la prevención del crimen en áreas residenciales de nueva creación, incluyendo locales comerciales".
Imagen de la calle Luna en Madrid extraída de 20minutos.es
Estas corriente se ha concretado en diferentes metodologías, entre las que destaca la llamada CPTED (Crime Prevention Through Environmental Design) tanto por las actuaciones llevadas a cabo como por el cuerpo teórico desarrollado. La CPTED ya ha sido ya implantada con éxito en bastantes lugares del mundo pero no es la única metodología que permite mejorar la seguridad modificando adecuadamente el ambiente urbano y arquitectónico. Ciudades como Toronto y países como Inglaterra, Sudáfrica, Holanda o Chile han intentado buscar sus propios sistemas. En la delegación europea de la ICA (International CPTED Association) se puede encontrar mucha información.
En realidad, un impulso muy importante a estos temas ha venido de las organizaciones feministas ya que las mujeres son uno de los colectivos que más sufren estos temas de violencia urbana. Pueden encontrarse algunos datos y enlaces en la página de generourban.
Quien esté interesado en comenzar el estudio de estas cuestiones puede encontrar una excelente bibliografía (incluso con remisión a lugares de la red fundamentales) en la publicación de la European Crime Prevention Network titulada A review of scientifically evaluated Good Practices for reducing feelings of Insecurity or Fear of Crime in the EU member states. Es un poco antigua (del 2004) pero merece la pena.
Parece pues que existe ya un mínimo cuerpo de doctrina en relación con el diseño urbano que permite establecer unas ciertas pautas. Resulta, sin embargo, bastante decepcionante el escaso interés de los urbanistas y los arquitectos por el tema: en la reciente conferencia Internacional "Ciudades, Urbanismo y Seguridad" celebrada en Madrid en enero de este mismo año la asistencia de estos profesionales fue muy escasa (pienso que no estábamos más allá de una decena). Las "ciudades seguras" están en la base de todas las justificaciones de la forma de construir la nueva ciudad fragmentada y en la explicación de los cambios que se están produciendo en la manera de usar los espacios públicos. Su estudio y análisis, por tanto, debería estar entre las prioridades de los centros de investigación y enseñanza.