sábado, 26 de septiembre de 2009

Identidad y espacios del anonimato

Ya hace bastante tiempo que no incluyo trabajos de mis alumnos en el blog. Ello ha sido debido, en parte, a que durante este último año no he impartido demasiadas clases por mis problemas de salud. Sin embargo, gracias al correo electrónico, he seguido dirigiendo tanto tesis doctorales como trabajos de investigación del doctorado. Aunque pueda parecer extraño el alejamiento físico no ha traído consigo una disminución en la calidad de las investigaciones. Tengo mucho donde elegir. Desafortunadamente pocos se pueden adaptar al blog. Entre ellos he elegido este de Sara González Moratiel titulado La identidad de los espacios del anonimato en cinco espacios intersticiales del Área Metropolitana de Madrid. Tiene interés por bastantes motivos pero sobre todo por dos. El primero es que se puede ver con bastante claridad que los mecanismos de la formación de la identidad de estos espacios son muy parecidos a los del resto de áreas de la ciudad. Y, además, porque su supuesta falta de identidad en cierto modo se pone en cuestión.

Vista deSao Paulo (Skycrapercity)

viernes, 4 de septiembre de 2009

Cañada Real Galiana, la vergüenza de Madrid

España posee un tesoro territorial que, cada vez más, se va poniendo en valor por la necesidad ambiental de crear redes ecológicas de espacios naturales. Se trata de un extenso conjunto de vías pecuarias: cañadas, veredas y cordeles. Se denominan de una u otra forma en función de su anchura. Las veredas no superan los 20 metros, los cordeles los 37,5 metros y las cañadas los 75 metros. Su creación responde a un uso del territorio denominado trashumancia. La trashumancia es una forma de explotación extensiva del ganado que consiste en desplazarlo desde las dehesas de invierno a los pastos de verano y luego a la inversa. No se trata de un fenómeno exclusivamente de este país ya que, por ejemplo, la practicaban en América los indios diaguitas antes de la llegada de los españoles. Lo que sucede es que en España se consolidó legalmente cuando en el año 1273 el rey Alfonso X creó el Consejo de la Mesta que se iba a encargar de promover y conservar esta extensa red de caminos ganaderos.

Las Cañadas Reales, de Wikipedia