sábado, 3 de julio de 2021

Londres, el Regent’s Canal

Uno de los recorridos que el turista avezado no debería olvidar cuando visita Londres es un paseo por el Regent´s Canal. Este canal, que hoy se ha convertido en un destino turístico de primer orden, no siempre ha tenido la importancia que ahora tiene. Es más, durante mucho tiempo ha estado prácticamente oculto. No es el Támesis, claro, ni siquiera el Grand Junction Canal cuyos más de 200 kilómetros son los que unen Londres con Birmingham. Pero es que los casi catorce kilómetros del Regent´s Canal se encargan, precisamente, de enlazar ambas vías fluviales. El tratamiento paisajístico que se ha hecho del mismo ha conseguido hacerlo “visible” y ponerlo en primer plano tanto para los londinenses como para los visitantes. Se trata, por tanto, de un ejemplo de patrimonio industrial recuperado de gran interés.  

Disfrutando del Regent’s Canal  traveler

Hace casi cuatro años que una de mis alumnas, Beatriz Cabau, me entregó un trabajo sobre el Regent´s Canal. Era un trabajo excelente que he recordado ahora porque Beatriz, después de leer la tesis doctoral titulada "El paisaje de los canales como proceso. Permanencia de la traza. Regeneración de Regent’s Canal, Londres", dirigida por Jorge Bernabéu, me escribe diciéndome que ha publicado un artículo sobre el tema en la revista The London Journal junto con Patricia Hernandez-Lamas y Johan Woltjer. Al leer el artículo, he pensado que debería recuperar aquel primitivo trabajo para hacerlo accesible a los lectores del blog. Como siempre que adapto un trabajo académico pido un ejercicio de comprensión ya que este tipo de documentos tienen su propia dinámica distinta a la del blog y siempre se pierden muchas cosas. De forma que, a continuación, se transcribe y adapta el trabajo de Beatriz.


Canales en el paisaje de la ciudad. Regent´s Canal, Londres
Autora: Beatriz Cabau Anchuelo

El Regent´s Canal fue construido entre 1812 y 1820 para mejorar el abastecimiento de combustible y materiales proveniente del norte del país y exportar mercancías, a través de los muelles de Limehouse en el Támesis al resto del mundo. Desde Paddington Basin, ramal del Grand Junction Canal construido en 1802, Thomas Homer propuso la construcción de un canal que discurriera paralelo a la New Road y evitar así el traspaso de mercancías entre barcazas y carros. El desarrollo, en ese momento, de la finca de Marylebone Park (Regent´s Park) por parte de John Nash y James Morgan condicionó el desarrollo del canal, conformando su límite norte. El canal discurría prácticamente en todo su recorrido por campo abierto, construyéndose, almacenes, fábricas, establos para caballos…. que se situaban en torno a las dársenas que, a su vez, lo hacían próximas a los mercados (Cumberland Market, Camden Market, Islington Market).

Regent’s Canal paralelo a la New Road  Greenwood ´s Map 1856
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La llegada del ferrocarril a Londres, solo diecisiete años después de la apertura del canal, y su rápido desarrollo, supuso una fuerte competencia en el trasporte de mercancías. Al igual que sucedía con el canal y sus dársenas, las compañías de ferrocarril querían situar sus terminales de las líneas principales cerca de la New Road, lo que implicaba que los ferrocarriles tenían que cruzar el canal para llegar a ésta. Euston Station, King´s Cross Station, St. Pancras Station, Marylebone Station, se situaron entre el canal y la New Road. De forma que estaciones y puentes ferroviarios irrumpieron en el paisaje del canal, quedando cada vez más escondido entre edificios y muros. El sistema de canales fue decayendo en las décadas de 1950 y 1960, lo que unido a la rápida desindustrialización de Londres, hizo que Regent´s Canal quedara en gran parte abandonado. La mayoría de estas antiguas zonas industriales no presentaban ningún grado de protección, y por lo tanto se convirtieron en espacios idóneos para su reurbanización.

New Road, Regent´s Canal y estaciones de ferrocarril  ©bcabau
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Actualmente, en las zonas de expansión ligadas a las estaciones de ferrocarril, el canal está adquiriendo un nuevo carácter de centralidad. El antiguo camino de sirga se ensancha conectándose mediante nuevas pasarelas peatonales con la trama urbana existente. El canal está pasando de ser un elemento ajeno y oculto a la ciudad, a un nuevo espacio que da carácter a su entorno. Históricamente el canal desempeñaba un papel industrial y era una empresa comercial. Hoy en día proporciona una fuente de ocio, con la oportunidad de caminar o montar en bicicleta a lo largo de su camino de sirga o navegar a través de él. Está clasificado como Espacio Público Abierto y como Sitio de Interés Natural. Además, es un enlace con otros espacios abiertos, y de ahí su clasificación como Cadena Verde, extendiéndose desde Regent´s Park, a través del Área de Conservación de Primrose Hill, enlaza con Camley Street Nature Reserve en King´s Cross y entra en el barrio de Islington.

El camino de sirga

Tiene un único camino de sirga que discurre en casi todo su recorrido por la margen izquierda (norte y este) a excepción de Hampstead Road Lock donde se sitúa en el lado sur y los dos túneles, Maida Hill Tunnel e Islington Tunnel, que carecen de él. Originariamente era de tierra, y en 1832 fue revestido con piedra. El ancho es muy variable, desde los 1,5 a 3,8 metros, con estrechamientos a su paso por los puentes. El canal es un elemento lineal de borde, asimétrico en sus márgenes, característica que se refleja en los primeros puentes de ladrillo en los que el arco se levanta desde el agua con una suave curva que cuando llega al camino de sirga se tiene que ajustar. La vegetación se sitúa a lo largo del camino de manera informal, formando tiras estrechas de carácter natural que contrastan con la dureza de los muros de contención. Esta vegetación espontánea se extiende a veces en la margen opuesta y en los estribos de los puentes, donde árboles como sauces, sicomoros y fresnos encuentran espacio para crecer.

Vegetación espontánea, Withmore Bridge  ©bcabau

Inicialmente de uso privado, el primer tramo del camino de sirga se abrió al público en 1968, desde Paddington hasta Regent´s Park, seguido por el que atraviesa Camden, según el proyecto denominado Canal Way Parks. En 1974 era posible caminar junto al canal desde Maida Hill hasta Islington Tunnel. Pero el canal a través de Hackney se encontraba en un estado lamentable. Y no fue hasta 1982 cuando se abrió al público el último tramo que discurría entre Islington Tunnel y Limehouse Basin. Los proyectos de mejora y paisajismo que se introdujeron en el camino de sirga (limpieza, mejora del firme y número de accesos) a raíz de su apertura al público, han permitido que hoy en día se pueda recorrer peatonalmente en casi toda su longitud. El único tramo privado es el que va de Little Venice a Maida Hill Tunnel, separado de la calle por una verja metálica. El tramo situado entre Grosvenor Tunnel y Regent´s Park, cuenta con un horario de apertura al público.

Caballo tirando de una barcaza cargada de carbón 1950  rcca

Pero donde el camino está experimentando mayores cambios es en los tramos próximos a las estaciones de tren, donde se están llevando a cabo, sobre suelo ferroviario de antiguos hangares y vías muertas, nuevos desarrollos urbanos de usos mixtos. En estos grandes desarrollos, en torno a Paddington Basin y la zona de St. Pancras-King´s Cross, el canal se entiende como oportunidad y parte de la transformación de la ciudad. El London Plan recoge una serie de recomendaciones cuyo objetivo es asegurar la resiliencia del futuro de Londres. La descentralización y creación de nuevos centros, generará oportunidades de trabajar más allá del centro de la ciudad. De esta manera las nuevas áreas de oportunidad se asocian a una estación: London Bridge Station, Liverpool Station, Victoria Station… En todas estas actuaciones urbanas tanto los edificios como sus entornos deben ser capaces de adaptarse a los continuos cambios, y calles y espacios públicos se han convertido en lugares de trabajo.

Los paisajes a lo largo del canal

De esta forma Regent´s Canal está adquiriendo un nuevo protagonismo, se ha hecho visible y se ha convertido en elemento identitario de esa “área de oportunidad”. Se han creado espacios públicos más amplios en sus orillas (plazas y graderíos), mejorando su accesibilidad mediante pasarelas peatonales de fácil acceso. Sin embargo, la interrupción del camino de sirga debido a los túneles y a los tramos privados y semiprivados hacen que éste no se perciba como un recorrido continuo sino fraccionado en tres: el primero sería Paddington Basin y Little Venice al oeste; el segundo iría desde Regent´s Park a Islington Tunnel zona central; y el tercero desde Islington Tunnel a Limehouse Basin al este.

Regent’s Canal como elemento de oportunidad  grlondon

El Regent´s Canal a lo largo de su recorrido presenta una variedad de paisajes urbanos, en lo que lo industrial convive con nuevos desarrollos residenciales y “modernos”, y la vegetación que crece de manera espontánea en tapias y estribos de puentes, adquiere protagonismo en los diferentes parques que se sitúan junto a él. Los condicionantes que influyeron en su trazado hicieron que el canal discurriera en gran parte “oculto” y “desconocido” para los ciudadanos y se convirtiera en un remanso de paz en la bulliciosa y turística Londres. A continuación, se describen tres de los paisajes que se pueden encontrar a lo largo del Regent´s Canal, ya sea navegando o paseando por su camino de sirga.

El canal como elemento de borde  ©bcabau

El primero sería el paisaje “verde”. Regent´s Park, es la zona más conocida y turística, en la que el camino de sirga discurre a una cota inferior, con taludes de vegetación en ambas márgenes (tratamiento simétrico de las orillas). Existen otros dos parques que se sitúan al este, en la margen izquierda junto al camino de sirga, Victoria Park y Mile End Park. Pero la sensación del paseante/navegante no es la de atravesar un parque, como en el caso de Regent´s Park. La existencia en la margen opuesta de edificación residencial, unifamiliar en el caso de Victoria Park y bloque exento de reciente construcción en el caso de Mile End Park, hacen que canal y camino sean un elemento de borde, de separación de espacios y usos.

Granary, building and place  bloomberg

El paisaje “canal y ferrocarril”. St. Pancras – King´s Cross Stations. Se trata de una zona con un marcado carácter industrial. Ligado primero a la llegada de la Imperial Gas Light and Coke Company y la apertura de Pancras Gaswork en la margen derecha del canal en 1824 y a la posterior construcción de las estaciones de St. Pancras y King´s Cross, con una gran superficie dedicada a hangares e intercambiadores, ha experimentado uno de los mayores procesos de reurbanización de Londres de estos últimos años. Lo interesante de esta zona es ver cómo los nuevos edificios de usos mixtos se relacionan con los numerosos edificios industriales rehabilitados (Granary Building, Gasholders, Coal Wharf), algunos de ellos reubicados, buscando el contacto visual con el canal. Se produce una apertura del canal a la ciudad, y se pone en valor su carácter industrial.

Regent's Canal, Hackney, Wenlock Basin  flyonwheels

El último de los paisajes que estamos analizando podríamos llamarlo “el paisaje de contrastes”, entre Islington y Hackney. Hay tramos del Regent´s Canal con elementos dominantes que le dan un carácter específico, ya sea natural, industrial, “tecnológico”… Pero hay otros donde el paisaje que se sucede en más caótico, los edificios que lo acompañan presentan unas características muy diferentes de usos, alturas, materiales, formas… Es el agua, como hilo conductor, y la vegetación espontánea que de manera informal crece en los estrechos reductos de lo construido, lo que se conserva a lo largo de todo el recorrido, en un paisaje urbano que se caracteriza por los cambios, la variedad y contraste de sus orillas.

Islington Tunnel en 1827  friendrgcan

Desde el punto de vista global el carácter especial del paisaje del Regent’s Canal se debe en gran parte a su naturaleza casi oculta, “secreta”, que responde por un lado a la topografía, y por otro es resultado de su uso industrial. El canal discurre en gran parte de su recorrido entre taludes y muros, a una cota inferior a la de su entorno más inmediato. Históricamente el uso industrial acompañaba al canal en gran parte de su recorrido. Fábricas, almacenes, gasómetros, establos o cobertizos abiertos, tenían una relación funcional con el canal y sus dársenas. Muchos de los edificios llegan hasta el agua, lo que crea una sensación de cercanía, pero también de oscuridad. Las fachadas principales de los edificios solían mirar hacia las calles adyacentes, siendo las fachadas traseras y tapias las que daban al canal, en las que la estética era secundaria, siendo éstas masivas con escasos y pequeños huecos. Formaban de esta manera una barrera, que interrumpía las vistas entre canal y ciudad.

Islington Tunnel en la actualidad  vice

Lo sucedido con el canal en los últimos años ha invertido esta característica histórica. De ser un lugar oculto, escondido tras altos muros, se ha convertido en un espacio atractivo donde el deseo de vivir a orillas del agua ha hecho que los nuevos edificios miren al canal. Se ha ganado una nueva fachada para la ciudad, a través del camino de sirga como paseo peatonal y del agua en sí misma como cualidad especial del recorrido. Como ya se ha visto, a medida que el uso industrial ha ido disminuyendo, la vida silvestre ha ido aumentando. De forma que Regent´s Canal se ha convertido en un corredor verde tanto desde el punto de vista visual como ecológico y su camino de sirga en un importante conector peatonal. En el momento en el que se plantea la conexión de zonas verdes de la ciudad a modo de infraestructura verde, los antiguos canales de transporte y sus caminos de sirga, se han convertido en elementos muy apreciados y de interés como conectores ecológicos y peatonales.

Conclusiones

La regeneración de Regent´s Canal y su entorno se debe, principalmente, a dos hechos. El primero sería la desindustrialización de Londres que hizo que quedara en gran parte abandonado. La mayoría de estas antiguas zonas industriales clasificadas como brownfield sites, no presentan ningún grado de protección, y se han convertido por tanto en espacios idóneos para su reurbanización. El segundo, a los nuevos desarrollos de usos mixtos que se están llevando a cabo en las grandes superficies de suelo ferroviario en torno a las estaciones del ferrocarril, como respuesta a las recomendaciones que se recogen en el London Plan con el objetivo de descentralizar y crear oportunidades de trabajar en áreas no centrales. Pero esto no solo ha sido posible por un cambio de uso del suelo, sino como consecuencia de una mayor concienciación sobre el valor y recuperación del paisaje histórico y cultural, (en este caso unido a un curso de agua artificial), tanto como activo de ocio para la población residente, como atractivo cultural alejado de los masificados centros turísticos.

Little Venice, paseo peatonal por el camino de sirga  fsl

El antiguo camino de sirga se ha convertido en un nuevo “paseo peatonal”, un recorrido lineal que conecta diferentes partes de la ciudad, con características y estructuras distintas. Donde lo antiguo y lo nuevo conviven junto con los elementos identitarios del canal. Las zonas residenciales de poca altura, los antiguos almacenes convertidos en viviendas, bloques de nueva construcción, zonas verdes que te envuelven y otras abiertas visualmente, se suceden a lo largo de esclusas, puentes y embarcaciones estrechas y coloridas amarradas en sus orillas. Sin embargo, debido al cambio de uso, con la utilización cada vez mayor del camino por paseantes, corredores y ciclistas, el ancho de éste es insuficiente en gran parte de su recorrido y presenta cruces incómodos, sobre todo bajo los puentes, donde el camino se estrecha. La escasez de zonas estanciales ha convertido a las esclusas en zonas de descanso y reunión. Como excepción se encuentran las dos zonas relacionadas con las estaciones ferroviarias, con espacios públicos más amplios en sus orillas, conectando ambas mediante pasarelas peatonales.
         El canal, a lo largo de su recorrido se ha convertido, no solo en un elemento de conexión peatonal sino también de identidad del paisaje urbano por el que discurre.

Beatriz Cabau

 
Hasta aquí el trabajo de Beatriz. Me ha parecido interesante por varias razones. La primera, como un ejemplo más de la tendencia detectada en muchas ciudades de recuperar los cursos fluviales, sean naturales o no. Por diferentes razones, algunas de nuestras urbes les habían dado la espalda (Madrid con el Manzanares, por ejemplo), hasta que se entendió que un río o un canal en una ciudad eran una oportunidad simbólica que no se podía desaprovechar. Incluso Vitoria-Gasteiz sacó a la luz un antiguo arroyo enterrado. Así, se ha visto como en el caso concreto del Regent’s Canal, el valor del patrimonio industrial como Patrimonio Cultural puede convertirse en una sólida base identitaria. Y, además, con un valor económico interesante. En el blog ya se ha comentado el caso de Madrid-Río (publicado en octubre de 2010) proyecto con el que se pretendía, precisamente, abrir la ciudad al Manzanares, e integrarlo en la misma como un elemento de primer orden. También el canal de Deusto en Bilbao a propósito de Zorrozaurre (publicado en julio de 2016) como ejemplo de recuperación de un Patrimonio Industrial. O la “vuelta a la vida” del arroyo Batán en Vitoria-Gasteiz (publicado en junio de 2018).
         Nuestras ciudades no pueden cometer el error de despreciar los cursos fluviales que las cruzan, aunque se trate de un aprendiz de río como el Manzanares o un canal artificial como el que ha tratado hoy Beatriz. No solo por la dificultad de encontrar conectores que ayuden a organizar una infraestructura verde urbana o rutas peatonales con un contacto, aunque sea mínimo, con la naturaleza, sino por la posibilidad de conseguir un elemento destacado que organice el mapa mental de la ciudad tanto para residentes como para visitantes.
 



Nota 1.-Es de gran interés la lectura del artículo citado al comienzo. El único problema es que está en inglés. La referencia es:  Beatriz Cabau, Patricia Hernandez-Lamas & Johan Woltjer (2021): “Regent’s Canal Cityscape: From Hidden Waterway to Identifying Landmark”, The London Journal,

Nota 2.-Y para aquellos interesados en el tema de los canales, la tesis doctoral de Beatriz titulada El paisaje de los canales como proceso. Permanencia de la traza. Regeneración de Regent’s Canal, Londres, dirigida por Jorge Bernabeú y que se puede leer gratis en el Archivo Digital UPM en este enlace.
 
 
 
 
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