jueves, 3 de octubre de 2024

Antonio Palacios, más que un arquitecto

Este año se celebra el 150 aniversario del nacimiento de Antonio Palacios Ramilo (1874-1945) y con tal motivo se desarrollan numerosos homenajes y actos de recuerdo a su memoria. No podía dejar pasar esta ocasión sin referirme a uno de los arquitectos gallegos más reconocidos. Antonio Palacios nació en O Porriño (Pontevedra) y la mayor parte de su obra se desarrolló en Madrid y en Galicia. Dado que de su faceta como arquitecto existen numerosas reseñas y publicaciones, además de una abundante colección de imágenes de sus edificios principales, querría en el artículo de hoy, referirme a otras facetas menos conocidas de su obra pero, desde mi punto de vista, también de gran interés. Sin embargo, resulta imprescindible mencionar algunas de sus arquitecturas más reconocidas, sobre todo pensando en mis lectores más jóvenes.

Antonio Palacios en su estudio  expansión

En primer lugar, habría que mencionar las de Madrid. Probablemente la más conocida sea la del Palacio de Comunicaciones (actualmente sede del Ayuntamiento). Como muchos de sus proyectos lo hizo en colaboración con Joaquín Otamendi otro joven arquitecto compañero de estudios de la carrera de ingeniería y arquitectura (fusionadas las dos en los primeros cursos) aunque la “especialidad” fuera al final la de arquitectura. En 1918 Otamendi pasa a ser arquitecto de Correos y cesa su colaboración. Obras de Palacios, también muy famosas, fueron: El “edificio de las Cariátides” (sucursal en Madrid del Banco Español del Río de la Plata, actualmente sede del Instituto Cervantes); el hospital de Jornaleros de Maudes; el Círculo de Bellas Artes; y también el Casino de Madrid, entre muchas otras. Ya puede comprenderse la importancia que tuvo su obra en la arquitectura madrileña y en la conformación de su imagen urbana.

Palacio de Comunicaciones actualmente
sede del Ayuntamiento de Madrid
  wiki


Aunque también tiene obras en muchos otros lugares. Pero en esta breve introducción solo mencionaré algunas de las realizadas en Galicia. Así, el Gran Hotel Sanatorio en el balneario de Mondariz (Pontevedra). En este balneario tiene también otras construcciones de gran interés como la Planta de Embotellado o el Pabellón de la Fuente. En Vigo, el teatro García Barbón. En Porriño (Pontevedra) la Casa Consistorial. En Noia (A Coruña) la central hidroeléctrica El Tambre. En Nigrán (Pontevedra) el Templo Votivo del Mar. Y para finalizar esta breve reseña de sus obras principales tengo que mencionar, por motivos casi personales, en O Carballiño (Ourense) el templo de la Veracruz iniciado en 1943, dos años después de su fallecimiento que tuvo lugar el 27 de octubre de 1945. Sus obras en Galicia y Madrid son numerosas, aunque también se extienden por otros territorios como Euskadi o Andalucía.

Templo de la Veracruz en O Carballiño (Ourense)  ayto

Pero en este artículo quería destacar otras facetas de su poliédrica personalidad probablemente menos conocidas. La que más se acerca a mis intereses es la de urbanista. En este campo realizó algunas propuestas de gran envergadura, aunque la mayoría se quedaron solo en el papel por diversos motivos. Durante la Guerra Civil española se encerró en su casa y se dedicó a pensar en soluciones urbanísticas para Madrid que concretó en la redacción de un Proyecto de Reforma de interior de la ciudad con actuaciones como el nuevo Salón del Prado o la Gran Vía Aérea sobre el Manzanares. Voy a empezar por referirme a esta última por ser, probablemente, la propuesta más utópica (¿delirante?) e irrealizable de todas. Se trataba de unir el Cerro Garabitas en la Casa de Campo con la Gran Vía mediante una serie de pasarelas aéreas de 85 m. de ancho a 60 m. del suelo soportadas por 16 edificios a lo largo de 3 kilómetros. En el Cerro habría un faro de 300 metros de altura. Dicen a Franco le encantó.

Gran Vía aérea sobre el Manzanares  telemadrid

La fuente principal de información del Proyecto de Reforma Interior de Madrid es un artículo del propio Palacios publicado en el año 1939 en la revista Horizonte titulado “Hacia el Madrid del año 2000”, en el que se menciona otra de las actuaciones a la que me voy a referir que es la Puerta del Sol, uno de los espacios más controvertidos de la ciudad. Ya en el año 1919 Palacios diseñó un anteproyecto que luego ampliaría y concretaría. La actuación consistía en la remodelación casi completa sustituyendo todos los edificios del entorno que “…no precisa ser derribado para su reforma” …ya que “se derrumba ya, espontáneamente, no solo por fatalidad mecánica, sino también avergonzado de su miseria”. Proponía la creación de una gran Vía Elíptica de enlace de todas las radiales acompañada de otra exclusiva para peatones. Cambiaría la fuente existente en el centro por otra mayor simbolizando ríos, continentes y océanos. En los extremos de la plaza dos grandes torres de 141 metros representarían las columnas de Hércules.

Reforma de la Puerta del Sol y Vía Elíptica  obraspalacios

En 1919 trabaja en una serie de anteproyectos para la ciudad de Vigo que presenta, difunde y defiende hasta que en 1930 recibe el encargo oficial que termina dos años después. El Plan de Extensión y Reforma Exterior de Vigo afectaba a todo el entorno de la ciudad creando hasta veinte ciudades satélite. El proyecto se aprobó en 1934 pero fue anulado finalmente tres años después. Los problemas que presenta de la topografía de la ciudad y el crecimiento caótico de la misma fueron dificultades a las que tuvo que enfrentarse. Su referencia fue Raymond Unwin que, según su entender, se encontraba equidistante tanto de Le Corbusier como de Camilo Sitte. A pesar de que sitúa a Vigo y Lavadores como polos de atracción de hasta veinte ciudades como Baiona, Redondela o Porriño, lo cierto es que la dispersión de los asentamientos hace que, en la realidad, todo el sistema no se comporte tal y como había previsto. Es decir, que cada núcleo contara con sus propios equipamientos y servicios. Este planteamiento supramunicipal no tenía base legal por lo que no fue posible llevarlo adelante.

Plan de Extensión y Reforma de Vigo  vigo

Además del Plan de Vigo Palacios realizó otros planes en Galicia que no llegaron nunca a ser realidad. Podemos mencionar el Plan Parcial de Vilagarcía de Arousa en el año 1922 (la Golpilleira), la reforma del acceso a la catedral de Ourense en 1927, la barriada obrera de La Espiñeira de 1930, o los accesos a la catedral de Santiago en 1932. Respecto al Plan de Vilagarcía se quejaba de que, como consecuencia de la ausencia de planificación, la ciudad había crecido siguiendo un modelo lineal dando lugar a la situación actual en que, en realidad, se trata de “una ciudad lineal de ‘once kilómetros’ de longitud por ‘cincuenta metros’ de anchura”. En la catedral de Ourense se trataba de dar acceso a la misma a través del Pórtico del Paraíso mediante la creación de una gran plaza realizando los derribos necesarios. También se quedó sobre el papel. Lo mismo que el acceso a la catedral de Santiago, trabajo por el que se le nombra arquitecto mayor honorario de la ciudad.

Diseño de las estaciones del Metro de Madrid  espaciomadrid
Estación de Chamberí, una de las mejor conservadas

Habría que mencionar otros proyectos, también urbanísticos, aunque de distinto tipo. En 1917 es nombrado Arquitecto oficial de la Compañía Metropolitano Alfonso XIII. Durante veinticinco años se dedicó al diseño y organización de las estaciones del Metro de Madrid. Diseñó desde las bocas de acceso hasta los edificios auxiliares, los ascensores y sus templetes e, incluso, el logotipo que ha permanecido hasta hoy en forma de rombo. Probablemente el más conocido sea el acceso de la Red de San Luis en la Gran Vía madrileña, trasladado piedra a piedra a Porriño donde se encuentra actualmente. Fue sin duda una ocasión única para que Palacios fuera organizando la imagen urbana de Madrid con la colocación de una serie de hitos que conformarían la configuración de una ciudad subterránea muy distinta de la exterior. Es otra faceta suya mezcla de arquitectura, decoración, urbanismo... con las que se reafirma su polivalencia. En este caso colabora con el ingeniero Miguel Otamendi.

Acceso al Metro de Madrid en la Gran Vía, trasladado,
a día de hoy, piedra a piedra a Porriño
  nchamartin

Como docente, no puedo evitar referirme a esta faceta suya (una más) en la que imparte clase en arquitectura durante dos cursos, desde el año 1914 al 1916. En 1917 se presenta a la cátedra de Dibujo Arquitectónico que, al final, se lleva Teodoro Anasagasti. A pesar de escaso tiempo que duró su docencia, los alumnos lo recuerdan como un profesor que les obligaba a dibujar proyectos todos los días en la asignatura de Proyectos de Detalles Arquitectónicos en la Escuela de Arquitectura de Madrid. Incluso tuvo tiempo de viajar con ellos a Egipto para ver las grandes obras como las pirámides. También impartió clases en la asignatura de Dibujo en la Escuela Superior de Artes e Industrias. Y siempre siendo el primero en realizar los diseños y dibujar los proyectos para que los alumnos tuvieran una referencia de la forma de abordar los temas que les proponía. En esto también hay unanimidad en considerar su habilidad. Y es que otra de las facetas que es necesario resaltar es la de dibujante y pintor.

Calle de Caldas de Reis (Pontevedra)
Dibujo de uno de sus cuadernos
  oporriño

Hay constancia de que, antes de ser arquitecto, pensaba dedicarse a pintar. Sus referencias en esta faceta fueron Ricardo Velázquez Bosco y Eduardo Rosales. Incluso llegó a recibir clases en la academia de este último. Su legado en este aspecto es muy numeroso, no solo por sus bocetos de arquitectura sino también por sus cuadros y acuarelas. Sus temas fueron muy variados, desde escenas costumbristas hasta figuras y retratos de personas. En su aproximación a una cultura especialmente gallega en el año 1912 organiza en Madrid la primera exposición de arte gallego a la que, incluso, aporta un cuadro. Años más tarde, junto con los pintores Álvarez de Sotomayor y Llorens organiza otras exposiciones del mismo tipo en A Coruña (1917 y 1923) y Santiago (1923).  Una parte importante de su obra como dibujante y pintor se encuentra en el museo de Pontevedra y en el monasterio de Poio.   

Acuarela de Antonio Palacios 1921  metromadrid

También se dedicó a escribir. Por una parte, algunos trabajos académicos sobre todo de historia. Así, en el número 83 (1926) de la revista Arquitectura: órgano oficial de la Sociedad Central de Arquitectos de Madrid. Pero, sobre todo, de su propia obra (muchos en la publicación citada anteriormente), y en revistas y periódicos como el Faro de Vigo. En ellos suele referirse a edificios históricos (le interesaba mucho el románico) como el Monasterio de Oseira, la iglesia de Moradillo de Sedaño en Burgos, o el monasterio de Armenteira. Y, en otros casos, para difundir sus propios proyectos en libros o gacetas. Así, el ya mencionado del año 1939 en la revista Horizonte titulado “Hacia el Madrid del año 2000” donde propone las actuaciones en el Salón del Prado, la reforma de la puerta del Sol o la Gran Vía Aérea sobre el Manzanares. También “Hacia el Vigo futuro. 1919-1920”, en el Faro de Vigo (1920) o, unos años más tarde: “Acerca del Plan de Extensión y Reforma Interior de Vigo”, también en ese periódico (1932).

Baiona (Pontevedra), Virgen de la Roca  casalderrey

Aunque se podrían mencionar muchas otras facetas de su poliédrica personalidad querría hacer notar su interés por la escultura y la decoración. Ya he mencionado la decoración del Metro de Madrid, pero querría terminar con su faceta escultórica ligada a su interés por la piedra. Su predilección por este material es debido a que su familia materna era propietaria de unas canteras de granito. El granito de Porriño fue parte de su obra, aunque por su dureza era difícil de utilizar para la ornamentación por lo que Palacios promovió el uso de maquinaria para su pulimento. Probablemente su escultura más famosa sea la Virgen de la Roca situada en Baiona (Pontevedra). La idea fue del ingeniero Gustavo Calvo y la cara y las manos las talló Angel García que colaboró con Palacios en otras esculturas y obras de ornamentación sobre todo en Madrid. Así, por ejemplo, las cariátides de la ya mencionada antigua sucursal del Banco Español del Río de la Plata actualmente sede del Instituto Cervantes en la calle Alcalá.

Madrid, “edificio de las Cariátides”  miradormadrid
Actualmente sede del Instituto Cervantes


Espero que este artículo haya despertado el interés por otros aspectos de la figura de Antonio Palacios que es, sobre todo, conocido por haber contribuido a crear una parte importante de la imagen urbana de Madrid. Muchos de sus proyectos que nunca se llevaron a la práctica, contienen ideas (a menudo calificadas de desmesuradas) que pueden ayudar a entender los ya construidos. Su formación y sus intereses eclécticos explican la multitud de facetas que conforman su personalidad creativa. En el limitado espacio de este artículo solo me he podido referir a algunas: urbanismo, docencia, publicaciones, escultura, ornamentación, pintura y dibujo… aquellos que se acerquen a su figura encontrarán mucho más. Personalmente me afecta en lo que se refiere al templo de la Veracruz en O Carballiño (Ourense) en el que durante diez años de mi niñez asistí a misa todos los domingos (y fiestas de guardar) y lo siento como parte de mis felices recuerdos infantiles, entre otros el de don Evaristo el párroco que consiguió hacer realidad uno de los proyectos emblemáticos de Palacios.