Berula Erecta, banco germoplasma, Jardín Botánico de Olarizu
domingo, 11 de marzo de 2012
Franzen, libertad, y la reinita cerúlea
Cenando hace unos días en Vitoria-Gastéiz con Elena, Luis y Rebeca, no se sabe muy bien cómo terminamos hablando del último libro de Franzen titulado, en español, Libertad. Pero, sobre todo, hablamos de las contradicciones con las que vivimos la mayor parte de nosotros y que se van agudizando conforme termina este período histórico y no acaba de alumbrar el nuevo. Me comprometí a escribir un artículo en el blog sobre el tema y les anticipé que en el título iba a figurar la reinita cerúlea. Los tres me insistían que, en lugar de la reinita cerúlea debería de figurar la Berula erecta, planta en peligro de extinción incluida en el Catálogo Vasco de Especies Amenazadas. No les he hecho caso, porque de habérselo hecho me habrían destrozado un título tan bonito (una reina chiquitita y, sobre todo cerúlea, siempre queda aparente, y el término erecta en el título de un artículo es demasiado explícito sexualmente) y me habría llevado a otros campos lejanos a los de Franzen que eran mi objetivo. Pero, en compensación, reproduzco en la imagen siguiente una foto del banco de germoplasma del Jardín Botánico de Olarizu que es, precisamente, de la Berula erecta.
sábado, 18 de febrero de 2012
Fotografía y creación del paisaje
Como tal construcción cultural la formación del paisaje sigue un proceso largo y complejo en el que intervienen muchos factores mezcla de elementos personales y colectivos. En cualquier caso, experiencia del lugar e interacción social constituyen la base necesaria para producir eso que se suele denominar identidad. Por supuesto que actualmente los sistemas de comunicación de masas son elementos básicos en su formación como también lo fueron en otros momentos históricos la pintura, la escritura o los relatos orales. Parece claro que el cine, la prensa, los libros, Internet o la televisión, contribuyen de forma destacada a la creación de paisajes. Analizaremos en otro momento el caso de Internet y la redes sociales como una nueva forma de creación de paisajes desvinculados del lugar (en el supuesto de que puedan existir). Pero hoy me gustaría abordar una cuestión más sencilla: la contribución de la fotografía a la creación de patrones relacionados con determinados paisajes. Y lo haré mediante un ejemplo concreto estudiado por Ignacio Bisbal, uno de mis alumnos de doctorado: la misión fotográfica DATAR.Todas las fotos del artículo pueden verse a mayor tamaño señalando en cada una de ellas.
Ansel Easton Adams, "Clearing Winter Storm", 1940 MYMET
martes, 24 de enero de 2012
Paisaje, lugar e identidad
Hace unos meses, charlando con mi amiga Esther Prada me dijo que había terminado una Guía de Buenas Prácticas para la observación del Paisaje Agrario como espacio patrimonial en el occidente peninsular por encargo del Ministerio de Medio Ambiente. La Guía es un documento muy interesante y si la podéis conseguir os recomiendo su lectura. También muy recientemente ha terminado un trabajo coordinado por Eduardo Martínez de Pisón sobre Sayago y el concello luso de Miranda (Braganza). Luego, hablando y hablando, terminamos remontándonos a nuestras tesis doctorales. La mía sobre la aldea rural gallega y la suya sobre sus queridas tierras de Sayago. Pero así como en mi caso dejé prácticamente abandonado el estudio del rural gallego después de aquella incursión juvenil, Esther no. Más constante que yo siguió trabajando en el tema hasta hoy mismo. No sé si cuando tenga mi edad seguirá Sayago va y Sayago viene pero, de momento, continua fiel a sus amores. También hablamos del blog y, al final, terminé convenciéndola para que
escribiera algo sobre el tema de la identidad y la relación con el
lugar. Como es una persona absolutamente cumplidora lo hizo. El
resultado es este artículo.
Todos los derechos reservados ©Esther Prada
martes, 3 de enero de 2012
Smart Cities, los inventos del TBO
Después de unos años en retirada las soluciones tecnológicas atacan de nuevo. Todos aquellos que conocen mi defensa de la eficiencia en el funcionamiento de edificios, ciudades y territorios, puede que se sorprendan de este ataque a una de las etiquetas (Smart City) que se presenta como la solución a nuestros males. Pero no creo que la serie de inventos que están apareciendo con el objetivo supuesto de mejorar el funcionamiento del sistema urbano resuelvan los problemas reales a los que nos enfrentamos. A mediados de los años cuarenta del pasado siglo XX el semanario de historietas cómicas TBO, el más famoso de la historia del cómic español, comenzó a publicar una serie humorística que tuvo diferentes nombres tales como Grandes Inventos o Inventos Prácticos, que se caracterizaba por organizar montajes sumamente rebuscados con objeto de solucionar problemas tontos, generalmente cotidianos. Sobre esta serie dice la Wikipedia (la cito, no como el Sr. Houellebeck): “En ella se describían pormenorizadamente inventos estrafalarios, a veces sumamente complejos, con una finalidad banal”.
Modelo de máquina llamadora para pulsar el timbre
Señalar en la imagen para verla más grande
domingo, 11 de diciembre de 2011
Del CONAMA local a Durban global
En el año 1992 se celebró por primera vez el Congreso Nacional del Medio Ambiente (CONAMA) . Desde entonces, más o menos cada dos años, se ha ido reuniendo esta asamblea española que ya va por su décima edición. A partir del año 2008 se decidió hacer una convocatoria anual de una sección llamada “Encuentro Local” coincidente con el CONAMA en los años pares, y a celebrar en otra ciudad fuera de Madrid en los impares. Surge así el llamado CONAMA local. En el 2009 se reunió en Sevilla, y en esta edición de 2011 en Vitoria-Gasteiz a lo largo de la última semana del pasado mes de noviembre. Bajo el lema Reformulando juntos las ciudades se organizaron una multitud de actividades: desde sesiones plenarias hasta mesas técnicas pasando por reuniones específicas o actividades en las calles. Como parte del Comité Científico me correspondió ayudar en los diálogos (otra vez con mi buen amigo Antonio Serrano) y en las mesas.
Cartel anunciando el 5º CONAMA local
martes, 22 de noviembre de 2011
Urbanismo y Salud Pública
Hace ya unos dos meses que se celebró en Mahón, en el Lazareto que hoy es la sede de la Escuela de Salud Pública de Menorca, un Encuentro de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo que reunió a profesionales de la Salud Pública y a urbanistas para hablar de la ciudad. Lo codirigimos entre Begoña Merino y yo, y el título fue “Urbanismo y Salud Pública. Planificación urbana saludable”. La razón de que no haya hecho un artículo hasta hoy es que el proceso de elaboración de conclusiones se hizo con la participación de todos. Y eso, si se quiere hacer de verdad, requiere tiempo. Se organizó en torno a cuatro mesas: “Naturaleza en la ciudad”, “Participación pública y educación ciudadana: construir nuestra ciudad”, “Ciudad y contaminación, la pasividad o la responsabilidad” y “Ciudades sanas y amables, ciudadanía activa”. No querría extenderme demasiado en el relato de lo que fue el encuentro porque mi intención es centrarme en las conclusiones. Sin embargo, sí me gustaría situar el debate de las cuatro mesas.
Mahón, isla de la Cuarentena, del Blog de Cata
domingo, 23 de octubre de 2011
Recuperando a Patrick Geddes
Lo primero es aclarar el titulo de este artículo. Al escribir recuperando a Patrick Geddes no he querido decir que los planificadores urbanos y territoriales estén “recuperando a Patrick Geddes” porque, en términos generales, bien para denostarlo o bien para ensalzarlo, nunca lo han perdido de todo. Lo que en realidad quiero decir es que yo, personalmente, estoy “recuperando a Patrick Geddes”. Me encontré por primera vez con Ciudades en evolución (la edición española que editorial Infinito de Buenos Aires publicó en 1960) durante mis años de estudiante de postgrado del Instituto de Estudios de Administración Local de Madrid. En aquellos momentos llegué a pensar que algún rayo de sol iluminaba desde Escocia una aproximación a los temas urbanos que incluía el territorio (y mira que es difícil que nos iluminen rayos de sol desde latitudes tan al norte). Es más, desde la comprensión de “todo” el territorio que, a diferencia de algunos acercamientos ecológicos de aquellos momentos, incluía los bichos humanos y su obra.
Sir Patrick Geddes
domingo, 2 de octubre de 2011
Coderch, Alejandro de la Sota y la Ciudad Astur
En los dos últimos viernes he estado en tribunales de tesis doctorales. Tesis muy diferentes entre sí y que probablemente marquen los límites de mi “zona de intereses” que, como podrá verse, son bastante amplios. La lectura de la primera ha sido en Barcelona y la segunda en Oviedo. He pasado en siete días de El exterior como prolongación de la casa (Los espacios intersticiales en clave tipológica, a través de dos obras de Coderch y De la Sota) a La sostenibilidad del crecimiento residencial de baja densidad. El caso del área metropolitana de Asturias. El autor de la primera ha sido Andrés Martínez y sus directores Carlos Martí y Víctor Brosa y se leyó en el departamento de Proyectos Arquitectónicos de la Universitat Politècnica de Catalunya. El tribunal, los directores y el doctorando éramos arquitectos. Cristóbal Manuel Carrero de Roa es el autor de la segunda, su director Fermín Rodríguez, y se leyó en el Departamento de Geografía de la Universidad de Oviedo. Todos geógrafos menos el doctorando y yo que éramos arquitectos. Ha sido maravilloso. Una de esas experiencias que me ratifican en la necesidad que tiene la investigación de ampliar el estrecho campo de visión de las áreas de conocimiento cerradas.
Coderch, Casa Gili, terraza, porche y vestíbulo. Tesis de AM
jueves, 8 de septiembre de 2011
Paisaje rural y arquitectura popular
Hace unos días hice una pequeña excursión desde Madrid a los llamados Pueblos Negros, un conjunto de aldeas situadas en el entorno de la sierra del Ocejón en la provincia de Guadalajara (España). El nombre alude al tono obscuro y bastante peculiar producido por la pizarra, material utilizado mayoritariamente en la construcción de sus edificios. No es mi intención describir detalladamente sus formas, estética o elementos funcionales característicos ya que no soy un especialista en arquitectura popular (o vernácula, según los autores) pero su visita me ha llevado a replantearme algunas cosas respecto al paisaje rural, su significado y su conservación. Temas sobre los que sí llevo trabajando bastantes años e íntimamente relacionados con el patrimonio cultural. Tampoco voy a entrar en la polémica planteada hace unos años cuando la Junta subvencionó con bastante dinero a los propietarios que aceptaran rehabilitar los viejos edificios respetando las formas y materiales tradicionales. Pasó de todo. Protestas, plantes e incluso dimisiones de alcaldes. He procurado no hacer sangre con algunas de las “reparaciones respetuosas con la tradición” que se han hecho, y sólo he incluido unos pocos ejemplos “curiosos”. Todas las fotos que ilustran el artículo las hice en Majaelrayo, Robleluengo, Campillo de Ranas y Roblelacasa, procurando fijar la mirada en lo que entendía más auténtico (aparte las excepciones mencionadas).
Campillo de ranas, arquitectura y lugares colectivos
jueves, 18 de agosto de 2011
Ci[ur], Urban y Urban-e
Repasando en estos tórridos días de vagancia y relajo (en España estamos en el período de vacaciones estival) los artículos que llevo escritos en esta columna, me he dado cuenta de que falta una parte fundamental de mi actividad profesional. Aunque hay algunas alusiones, no he escrito casi nada que se refiera al día a día. He hablado de mis correrías por todo el mundo, de lo que he pensado y de lo que pienso relativo a temas actuales o no actuales, de congresos, jornadas y cursos de postgrado, pero no de mis labores cotidianas. Y es algo que también se suele hacer normalmente en un blog. Aprovechando que Marian Leboreiro me escribe un correo diciéndome que (¡por fin!) ha salido a la luz el primer número de la revista Urban-e, me he decidido a dedicar este artículo a las publicaciones de mi lugar de trabajo habitual. A pesar de lo que pueda parecer, la mayor parte de mi vida profesional se desarrolla en Departamento de Urbanística y Ordenación del Territorio de la Universidad Politécnica de Madrid, y tengo un pequeño despacho (muy sostenible debido a sus dimensiones) en la Escuela de Arquitectura. Y digo de lo que pueda parecer, porque lo que debería deducirse de la lectura de los más de cien artículos anteriores, es que estoy siempre en otras movidas. Pero es una impresión equivocada. Lo cierto es que reconozco mi suerte por estar donde estoy y no cambiaría lo que hago y donde lo hago por casi nada.
lunes, 1 de agosto de 2011
La protección del patrimonio urbano
Hace ya algunos años, y en colaboración con los hermanos Juan y Miguel González, redacté la modificación del Plan General de Ávila (España) con objeto de adaptarlo a la Ley de Patrimonio Histórico Español. Para acercar más el plan a los abulenses decidimos escribir una serie de artículos en el Diario de Ávila que nos permitieran explicar mejor los objetivos a conseguir. Me he acordado de aquellos artículos en una reciente visita a esta extraordinaria ciudad Patrimonio de la Humanidad y, más por nostalgia que por otra cosa, me entretuve releyéndolos. Estamos en verano y no quiero ponerme crítico con algunas de las actuaciones incomprensibles (desde mi punto de vista) que se han hecho sin consideración alguna a la categoría de este conjunto histórico. Sólo querría rescatar algunas ideas, que me han sugerido la lectura de aquellos artículos de entonces, revisadas con ojos de hoy. En lo fundamental sigo pensando de forma muy parecida porque los problemas subsisten. Una aproximación más técnica puede encontrarse en el libro que publiqué en la editorial Akal titulado La protección del Patrimonio Urbano, instrumentos normativos que, a pesar del tiempo transcurrido (y a tratarse sólo la legislación nacional cuando estas competencias son compartidas con las Comunidades Autónomas) entiendo que todavía mantiene un cierto interés. Mi pretensión con este artículo no es otra que plantear algunas cuestiones acerca del tema de la protección que me preocupan desde hace bastante tiempo. Y voy a tratar de hacerlo de la forma más clara que pueda porque soy consciente de la variedad de intereses y procedencias de muchos de los lectores del blog y, además porque buena parte de ellos están de vacaciones y tampoco es cuestión de ponerme demasiado evanescente. Ilustro el texto con imágenes de lugares maravillosos declarados Patrimonio de la Humanidad.
Ciudad amurallada de Ávila, España (Wikimedia)
martes, 12 de julio de 2011
Infraestructura verde
Hace tiempo que no dedico un articulo a mis andanzas por Jornadas, Congresos, y otros eventos de estas características donde se ponen en común ideas, propuestas, y se discute sobre planteamientos discrepantes. El problema es que no siempre es así y, a veces, suelen convertirse en tediosas exposiciones que consisten en repetir oralmente lo que aparece a lo largo de veinte o treinta diapositivas montadas en un PowerPoint. Los que me conocen saben de mi alergia a dicho programa aunque suelo utilizarlo bastante para cambiar el tono de la charla en determinados momentos, y poco para ilustrar mis explicaciones. Pero lo peor no es la retahíla de imágenes sino la constatación de que, en algunos casos, después una hora de exposición el orador no se ha dignado a comunicar ni una sola idea al auditorio. Esto que sucede algunas veces en estos sitios es bastante más frecuente en la docencia universitaria. En el año 1933 en el curso de inauguración de la Universidad de verano de Santander, José Ortega y Gasset decía: “Una lección es una peripecia de fuerte dramatismo para el que la da y para los que la reciben. Cuando no es esto no es una lección sino otra cosa –tal vez un crimen– porque es una hora perdida y la vida es tiempo limitado y perder un trozo de él es matar vida, practicar asesinato blanco. Como en la Universidad actual –y conste que no me refiero sólo a la española– las lecciones no suelen ser eso que he llamado peripecia quiere decirse que la Universidad es un lugar de crimen permanente e impune”. Estamos en el año 2011 y no me parece que, desde entonces, la situación haya cambiado de forma apreciable.

Suscribirse a:
Entradas (Atom)